El Tribunal Supremo alarga el plazo para perseguir el administrador
Hemos comentado más de una vez que ser administrador de una sociedad es un riesgo y, también, que si una sociedad no ha sido bien llevada y deja deudas hay camino para ir contra su administrador. Una nueva sentencia del Tribunal Supremo amplía todavía más el plazo para perseguir a los administradores, protegiendo así y aún más a los acreedores.
La sentencia del Tribunal Supremo tiene su origen en un caso enjuiciado en los juzgados de mercantiles de Barcelona y con polémica servida entre juzgado y Audiencia Provincial. De hecho, con polémica sobre cuándo prescribe el plazo para ejercitar la acción contra los administradores. Hasta ahora, se entendía que su responsabilidad se extinguía una vez pasados cuatro años desde su cese en el cargo.
Pues bien, la Audiencia Provincial de Barcelona resolvió de forma diferente que el Juzgado Mercantil y el Tribunal Supremo ha confirmado esta línea jurisprudencial que pone en práctica una modificación de la Ley Concursal que entró en vigor en 2012: la declaración del concurso de acreedores interrumpe el plazo de prescripción de la acción contra los administradores, socios y auditores de la sociedad deudora. Es más, el cómputo del plazo se reanuda de nuevo en el momento de la conclusión del concurso.
Sin duda esto supone un tratamiento aún más duro por los administradores y, en contraposición, el refuerzo de los derechos y la protección de los acreedores. Tras esta sentencia queda claro que no sólo mientras el concurso de acreedores esté vivo se pueden depurar las responsabilidades de los administradores, sino que una vez terminado este, también. Y, como no, cuando hablamos de depuración de responsabilidad de los administradores, entre otros pronunciamientos, en última instancia hablamos de la posibilidad de que los acreedores que no han cobrado de la sociedad deudora, puedan acabar cobrando y haciendo responsable al administrador y su patrimonio personal.
